“… está viniendo el tiempo de la rebelión y vamos a tener que fortalecernos para rebelarnos” Nora Cortiñas
En el marco del mayo obrero, insurgente y disidente, hoy en el contexto de la pandemia global de Covid-19, distintas organizaciones del campo popular de Córdoba nos reunimos vía conferencia virtual para discutir la situación de nuestro pueblo y hacer un llamamiento a la unidad, la lucha y la organización de los sectores que estamos siendo más castigados.
Reafirmamos que de ningún modo el aislamiento físico puede convertirse en aislamiento social, ya que sería funcional al agravamiento de nuestras condiciones de vida e implicaría que se rompan vínculos esenciales que nos permiten resistir el avance del poder de turno sobre nuestros derechos.
(Des)orden mundial
“No queremos ser más esta humanidad” Susy Shock
Frente a la maniobra de quienes manejan los mercados mundiales, pretendiendo responsabilizar a la pandemia de la crisis actual, sostenemos que la pandemia es más bien un detonante que profundiza y acelera mucho la crisis socioeconómica que se arrastra hace ya varios años.
A nivel internacional, algunos datos muestran cifras que van creciendo día a día, a tal punto que hace apenas unas semanas la OIT estimaba que el parate mundial iba a generar una desocupación de 100 millones de personas y en poco tiempo ese número se duplicó a más de 200 millones. También se afirma una caída general de la economía mundial, salvo en China que sería el único país que crecería pero en un porcentaje pequeño (apenas el 1,5%), muy inferior al que venía teniendo. En Latinoamérica en particular, se estima que la economía caerá entre un 5% y 6% , mientras que en EEUU hay más de 30 millones de desocupados, recordando los números de la peor recesión económica de la historia mundial, en la década del 30.
Esta crisis no deja de mostrar el largo deterioro del sistema capitalista, patriarcal, colonial e imperialista. En estos tiempos, observamos nuevas dificultades globales en las formas básicas de explotación (soberanía sobre el territorio, control regional en la geopolítica internacional y el rol de los estados en el sistema global), en la hegemonía de las relaciones imperialistas -tensadas sobre todo entre China y EEUU; así como en el control sobre nuestras vidas cotidianas. Ante la receta de quedarse en casa, en todos los rincones del mundo padecemos el aumento de hasta 600% en los casos de violencia de género y el número en ascenso constante de femicidios y transfemicidios, en su mayoría cometidos por parejas o ex parejas; lo que demuestra que el mundo, tal como lo habitamos hoy en día, es especialmente agresivo con las corporalidades de mujeres, lesbianas, travestis, trans, maricas, bisexuales y no binaries.
La represión policial y el ciberpatrullaje sobre la población civil se ha multiplicado y sentimos necesario mencionar la situación de la población carcelaria, que encontrándose en condiciones de insalubridad y hacinamiento, podría ser víctima de hecho de condenas masivas a muerte. En este punto no podemos dejar de mencionar a los cientos de prisioneros y prisioneras políticas de América Latina, que por distintos medios están manifestando sus exigencias para que les den prisión domiciliaria. Es así en el caso de Chile con les cientos de preses de la revuelta popular y preses mapuches por defender sus territorios. Perú cuenta con más de doscientos prisioneres politiques revolucionaries que llevan dos y hasta tres décadas encerrades. En Paraguay existen prisioneres militantes y revolucionaries que llevan más de 10 años en prisión. También Colombia tiene miles de prisioneres polítiques. Y en Bolivia se encuentra en prisión Facundo Molares, periodista Argentino preso ilegalmente por mostrar y denunciar el golpe de estado, vulnerándose hasta el día de hoy todos sus derechos.
La pandemia se da en un contexto donde se viene desarrollando la cuarta revolución industrial, en la llamada era de la digitalización y robotización, que produce nuevas y más perfeccionadas formas de producción y acumulación capitalista, aumentando así la explotación y desocupación de la clase obrera. En ese marco, la respuesta de los estados ante la pandemia es garantizar el aumento de la precarización laboral, suspensiones y desempleo del pueblo; para rescatar las abultadas tasas de ganancias de les empresaries.
En el mundo de los préstamos internacionales, surgen pronunciamientos por condonaciones y quitas en las deudas externas, al son de negociaciones con estados como el argentino, para pagar deudas ilegítimas, ilegales, odiosas y fraudulentas. Quita en los montos de deudas, flexibilización de las condiciones trabajo, recorte de salarios y rescate económico de empresas desde los bancos estatales están siendo los ejes de una nueva recomposición mundial del capitalismo, no sin tensiones entre burgueses, mientras buscan convalidar de hecho este nuevo ciclo de destrucción de trabajos y condiciones de vida de trabajadores.
Córdoba frente a la pandemia
“Nos preguntaron qué necesitábamos para nuestra salud, desde alimentos hasta indumentaria. Respondimos que necesitábamos solidaridad militante(…)Les hablamos de nuestros trabajadores, de sus aspiraciones, de sus desvelos, de sus sacrificios. Les dijimos que las fogatas que alumbraban las calles de Córdoba surgían desde el centro de la tierra impulsadas y encendidas por nuestra juventud estudiosa y trabajadora y que jamás se apagarían porque se nutren de la vida y de los ideales de un pueblo rebelado contra la opresión que se ejercía sobre él y estaba dispuesto a romperla, pasara el tiempo que pasara”  Agustín Tosco
Córdoba es la tercer provincia con mayor cantidad de casos de Coronavirus en el país y hoy amenaza con replicar la gravedad de la crisis sanitaria del Gran Buenos Aires. Registrándose al 20 de mayo 431 casos, esta es una provincia donde se hace tangible la ausencia de políticas públicas que garanticen la salud y las condiciones de vida digna. Mientras que para el gobierno provincial y municipal la pandemia es la excusa perfecta para hacer avanzar el ajuste y la precarización de un amplio sector de trabajadoras y trabajadores, nuestras condiciones cotidianas de vida y trabajo resultaron ser el caldo de cultivo perfecto que está disparando definitivamente el ritmo de contagios de coronavirus en la capital provincial, debiendo volver a una fase de aislamiento físico más restrictivo.
Trabajo con todos los derechos
En este escenario, una nueva arremetida contra los derechos de les trabajadores nos muestra cómo avanza el ajuste local: con un proyecto aprobado de modo express (16 votos por mayoría automática), el Gobierno de Martín Llaryora sancionó una ordenanza que implica un recorte salarial para los empleados municipales de entre un 10% a 15% y limita la jornada laboral de siete a seis horas. Esto se suma a los despidos y suspensiones que Córdoba tiene por fuera de «los acuerdos entre patrón y rama sindical» en distintos rubros: Continuum call center, 127 suspensiones; Bar Sorocabana, 6 Suspensiones; Municipalidad de Villa Gral Belgrano, 6 despidos; Neverland, 48 Suspensiones; Anses, Renaper y Pami, 20 Despidos; Goliardo Teatro Colón, 25 Despidos; Bar Favela, 20 Suspensiones; Flykitchen, 18 despidos; Maniagro, 30 Despidos.
En otras de sus constantes líneas de ajuste, el gobierno de Schiaretti suspendió los programas de empleo dejando así sin ingreso a gran cantidad de jóvenes, en su mayoría mujeres, que accedían a estos programas y que el gobierno titula «promoción de empleo»; pero es necesario expresar que en realidad se trata de precarización laboral promovida por el estado. Estas políticas profundizan el hambre, en sintonía con la deficiencia en el funcionamiento de Paicor y de programas como «Más leche, más proteínas», que demuestran no alcanzar para las profundas necesidades que vive nuestro pueblo. Por último y no menos importante, la baja de las tarjetas alimentarias a miles de personas deja en total vulnerabilidad y abandono a los sectores más precarizades en plena pandemia.
Educación como práctica de liberación
La precarización del trabajo docente en la provincia se agrava ante la falta de recursos y la sobreexplotación que genera el trabajo virtual: sin horarios y con exigencias que exceden la formación y los recursos de les compañeres. Por otro lado, pero en la misma sintonía, la política de ahorro del gobierno, entre otras cosas, ha suspendido los actos públicos y las convocatorias para acceder a cargos en educación, dejando a más de 3000 docentes suplentes y de ramos especiales enfrentando las consecuencias de encontrarse sin salario ni trabajo.
Desde la Educación Popular con una concepción pedagógica crítica como encuadre, sostenemos diálogos -a pesar del encierro impuesto- con las organizaciones barriales, con docentes de todo el país y en sus más variadas actividades y pensamos que, en el proceso de enseñanza y aprendizaje resulta prioritario romper la disociación entre el cuerpo y la mente, promover el acuerpamiento y la construcción colectiva, invitar a sentipensar la realidad. En tal sentido, sin desconocer la utilidad que en los tiempos que corren nos aportan las plataformas virtuales, entendemos que la virtualidad implica simultáneamente la virtualización del sujeto (el grupo) y de las prácticas. Nos preguntamos en este contexto por el impacto que estas sobrecargas virtuales dejarán en las infancias y en quienes tienen que sobrellevarla (familias, niñes, jóvenes, docentes) nos preguntamos el porqué de tantas presiones y exigencias de tareas, temarios, proyectos cuando lo seguro será que hasta que no nos encontremos mirada a mirada, escucha a escucha, no sabremos qué aprendizajes, experiencias y sentires estuvieron presentes en todo este tiempo.
Por un sistema único y fortalecido de salud pública
Les trabajadores de la salud en Córdoba, como en todo el país, también se encuentran gravemente golpeados por la situación de pandemia. Realizaron una jornada de lucha el jueves 7 de mayo para exigir aumento salarial de emergencia, elementos de protección para los hospitales, licencias extraordinarias por pluriempleo, entre otras. El gobierno provincial da la espalda al sector de trabajadores, que están en la primera línea de lucha contra la pandemia, y la persecución a quienes luchan se hace presente.
El dengue es otra de las problemáticas que se vive en los barrios de Córdoba y que cada vez afecta a un mayor porcentaje de población. Teniendo una clara relación con las condiciones insalubres de vivienda e higiene, se cuentan 3646 personas afectadas, de las cuáles 2549 pertenecen a capital y 1043 al interior de Córdoba.
Más prevención, no a la represión
Ante las pocas posibilidades de cumplir una cuarentena con todas las necesidades garantizadas por parte de millones de trabajadorxs que dependen de las calles para subsistir, el estado prioriza forzar el encierro, registrándose un gran número de detenciones con la excusa de “estar violando la cuarentena”. La inoperancia del estado y su recurso rápido a la militarización se ha manifestado en numerosas ocasiones ante esta situación de crisis, llegando hoy al punto de cercar barrios enteros sin garantizar las mínimas condiciones de higiene, tratamiento médico y alimentación.
Desde el comienzo de la cuarentena, las detenciones en el marco del DNU 297/2020 se han acumulado en el territorio cordobés alcanzando, tras 60 días, las 25.716 – un promedio de 428 detenciones diarias. Distintas organizaciones del campo popular denunciamos desde hace varios años el modelo del aparato represivo cordobés, que hoy con el pretexto de la pandemia, pone una inmensa cantidad de recursos (logísticos, económicos, humanos y tecnológicos) en continuar las políticas represivas, al punto de implementar el uso de tecnologías de videovigilancia y tener que reconocer abiertamente el espionaje en redes realizado en oficinas especiales de la Central de Policía de Córdoba.
Las cárceles de Córdoba -provincia entre las primeras en cantidad de preses sin condena- cuentan con una población en contexto carcelario de 10 mil personas y tan solo 150 camas nuevas dispuestas para atender la emergencia sanitaria. Hoy les preses se encuentran haciendo frente a la pandemia casi por su propia cuenta, resistiendo la represión a sus reclamos y confeccionando alcohol en gel y barbijos, mientras tratan de garantizar con su trabajo no pago la limpieza de las instalaciones carcelarias.
A esto se le suma la persecución mediante la judicialización a quienes luchan. Uno de estos casos tiene a 27 estudiantes de la Universidad Nacional de Córdoba procesades por defender la educación pública durante el conflicto educativo que se dió a nivel nacional en el 2018.
Políticas reales para enfrentar la violencia machista
A lo largo de la cuarentena y en sintonía con el resto del país y el mundo, el aumento de la demanda de atención al Ministerio de la Mujer de la provincia (ex Polo de La Mujer) y la aparición de nuevos casos de femicidio vuelve a poner sobre la mesa la necesidad urgente de mejoras presupuestarias y de infraestructura para las condiciones de trabajadoras y espacios donde se atiende cotidianamente las necesidades de supervivencia de miles de mujeres, lesbianas, travestis y trans. La asamblea Ni Una Menos realizó en las últimas semanas 2 acciones en el Ministerio de la Mujer para pedir audiencia con la Ministra Claudia Martinez: seguimos señalando que las medidas tomadas son insuficientes, que las trabajadoras del Ministerio de la Mujer trabajan en condiciones de precariedad laboral y salarial y que se necesitan recursos para abordar la emergencia en violencia de género en el marco de políticas reales para erradicarla.
Además, vivimos en una provincia donde la violencia machista se combina crudamente con la impunidad de agresores y femicidasEn Córdoba seguimos exigiendo libertad para Flavia Saganías, condenada a 23 años de prisión por haber denunciado en redes al abusador de su hija: hoy también exigimos prisión domiciliaria para que pueda estar con sus 5 hijes. Tampoco nos olvidamos de Micaela Barattini, condenada por la justicia patriarcal y misógina a 13 años de cárcel.
Denunciamos también los casos de abandono de persona de quienes recurrieron a hospitales o pidieron ambulancia por enfermedad y no las atendieron por no presentar síntomas de covid. Liliana Gimenez, maestra, 44 años,en Villa Giardino, Pamela Nieto, 24 años sin atención en el hospital de La Falda y una mujer de 27 años muere en terapia intensiva luego de padecer dolores durante días, y en lugar de la ambulancia envían el móvil policial sin respetar los protocolos de salud.
En lo que va de la cuarentena, ya contamos 32 femicidios, 1 cada 26 horas. En Córdoba el caso de la desaparición y búsqueda durante 18 días y femicidio de Cecilia Basaldúa en Capilla del Monte nos conmocionó, siendo el caso acompañado por movilizaciones en traslasierras, junto a ruidazos y pedidos de justicia en toda la provincia.
Por último y no menos importante, recordamos que la Educación Sexual Integral (ESI) y el derecho a la Interrupción Legal del Embarazo (ILE) son parte de nuestras necesidades cotidianas esenciales, por lo que exigimos el correcto aprovisionamiento de misoprostol en instituciones de salud pública, así como exigimos que se lleven a cabo los programas estatales para especializar a docentes en ESI.
Ollas populares, organización en los barrios
Ante la falta de respuestas por parte del Estado Nacional, provincial y municipal, muchas organizaciones volvieron a los ollazos populares. Parecía lejano el 2001, pero en cada barrio donde el hambre, la desocupación y el trabajo precario, cooperativo,ambulante, de la economía popular fue afectado por las restricciones, se profundiza la crisis social y económica. Merenderos y comedores multiplican su trabajo solidario, sumándose vecines y personas que antes de de la cuarentena podían sostener su economía y que hoy viven bajo la línea de pobreza. Hoy estamos reclamando por una ley de abastecimiento para que el estado pueda intervenir las empresas para la producción y control de precios según las necesidades de los sectores más vulnerados. Las ollas populares se multiplican y se hacen al son de consignas como La deuda es con el pueblo, no con el FMI. Cuarentena digna YA.
Armonizar es pagar jubilaciones dignas
Un nuevo golpe del gobernador Schiaretti a les jubilades nos pone en alerta y movilización, ya que una vez más y en medio de la ciudad vallada por nuevos casos de coronavirus, se sancionó una ley que afectará el cálculo de haberes para la edad jubilatoria y propiciará un nuevo ajuste histórico, antidemocrático y perverso a jubilades estatales administratives, municipales, de EPEC y bancaries. La armonización con el ANSES y los recortes a los aportes son una muestra más de que los supuestos déficits de estas administraciones no pueden recaer sobre los bolsillos de quienes han vivido de su trabajo toda su vida.
Entonces, en cada una de nuestras trincheras, ¿cómo luchamos?

“No estoy aceptando las cosas que no puedo cambiar, estoy cambiando las cosas que no puedo aceptar.” Angela Davis

Las izquierdas revolucionarias proponemos una lucha territorial, una lucha contra la burocracia sindical, la lucha por les preses polítiques, la lucha por las mujeres y disidencias, la batalla ecológica contra el extractivismo, por los derechos de los pueblos originarios, por la economía popular, la educación popular. Es decir, las izquierdas revolucionarias tenemos una enorme potencialidad para la liberación.
Hoy, vemos la unidad de quienes luchamos por nuestras vidas y nuestra dignidad como una tarea indispensable para enfrentar la crisis y proponer una salida. En ese sentido, se hace imperiosa la importancia de compartir lecturas, perspectivas y experiencias entre diferentes organizaciones que salen a luchar en diversos territorios de la región.
Queremos que este llamamiento a la unidad de las luchas sea propositivo, sosteniendo firmemente:
Que en esta situación es importante generar solidaridad y sostenerla, habiendo la necesidad de desarrollar acciones de articulación entre las organizaciones para poder alcanzar la unidad en cada lucha reivindicativa y política.
Que es necesario retomar experiencias donde se rompa el aislamiento sin romper el cuidado. Urge seguir apoyándonos en las redes y difundir las acciones, con pliegos y reivindicaciones de las organizaciones del campo popular.
¡Cuarentena digna ya!
La deuda es con el pueblo, ¡no con el FMI!
¡Que la crisis la paguen los poderosos y no la clase trabajadora! ¡Nuestras vidas valen más
que sus ganancias!
¡Basta de persecusión y represión a les que luchan! ¡Libertad a les preses por luchar!
¡Libertad ya a Facundo Molares!
¡Abajo el golpe de estado en Bolivia!
¡Frente al ajuste, lucha y organización!
¡Basta de femicidios, transfemicidios y travesticidios!¡Basta de violencia machista y patriarcal! ¡Vivas nos queremos!
Pandemia es el capitalismo
Frente Popular Dario Santillan – Marabunta – Venceremos Partido de trabajadorxs – Correpi – Movimiento Pueblo Lucha y Trabajo – Izquierda Latinoamericana y Socialista – Equipo de Educación Popular Pañuelos en Rebeldía – Votamos Luchar – Fogoneros – Comité por los Presos Políticos y Luchadores Sociales- Casa de la Memoria Imprenta del pueblo Roberto Matthews

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