Venceremos: ¿Cómo analizan la situación de endeudamiento y fraude al Estado por parte de Vicentin como empresa testigo del sector agroexportador?
Cristian Montaño: A Vicentín, desde que asumió el gobierno le Macri le vienen dando préstamos. Muy grandes, sin tener el respaldo económico que deberían tener. Cuando Macri pierde las PASO y después las elecciones, esta empresa entra en cesación de pagos ya con una deuda abultadísima y fraudulenta. Estafa al estado por $18.000 millones. Esa es la deuda que tiene solo con el Banco Nación, más allá de las deudas con productores o empresas que le hacían servicios a esta agroexportadora. Vicentín tiene muchas empresas de servicios que trabajan en su actividad.
Antes de entrar en cesación de pagos, Vicentín le vende el 16.67% de la planta Renova en Timbúes a Glencore. Le dicen “la joya de la abuela”, es la planta de procesamiento de soja más grande que hay en el mundo. En estos días se supo que el valor fue de 122 millones de dólares. No se sabe dónde está ese dinero.
Ha estafado a medio país, con las deudas con el estado, con los productores. Estafó al estado, por intermedio del fisco, con las empresas Off-Shore, las triangulaciones que tiene con Vicentín Paraguay y Vicentín Uruguay. Hacen triangulaciones como si fueran compras internas y no pagan impuestos que hay que pagar acá en Argentina.
Hoy Vicentín está en una situación muy complicada. No sabemos si tiene patrimonio, después del pedido de expropiación empezaron con un proceso de vaciamiento de la empresa que fue descomunal. Por eso se pedía la intervención inmediata, para que no pase eso.
Habrá que ver qué queda a nombre de Vicentín SAIC después de que se haga la expropiación o intervención, cuando pase a ser una empresa mixta y se abran los libros contables. Es tan difícil el entramado que tienen que cuando se abran los libros va a ser complicado.
V: ¿Qué lugar ocupa esta empresa dentro de la burguesía agraria? ¿Se puede pensar bajo su control la regulación de la exportación agrícola?
CM: La empresa Vicentín es una de las principales agroexportadoras del país. Cuando comenzó era una empresa familiar, una más de las que exporta en el negocio del aceite y los subproductos. En su momento estaban en el número 15 del ranking de exportadoras. Después de algunos años, durante el gobierno de Macri entre 2015 y 2019 fue cuando llegó al puesto 5. En algún momento llegó a estar en el primer puesto de las agroexportadoras.
Este crecimiento se dio cuando empezaron a asociarse con firmas extranjeras y armaron firmas paralelas para evasión de impuestos. Con las controladas de Uruguay y de Paraguay, con su asociación con Glencore, la construcción de la planta de Renova. Ahí es cuando más empieza a escalar con la evasión y los créditos acumulados. Sea del gobierno nacional o con los préstamos pedidos al exterior. Se expandió mucho y llegó a ser la primera empresa agroexportadora del país. No fue por situaciones regulares sino por los créditos, las evasiones al fisco y las maniobras fraudulentas de los empresarios.
Tener esta empresa con una parte estatal serviría para controlar las exportaciones. Ayudaría a controlar el precio y la exportación de granos y subproductos. Y además es una entrada de dólares directos a las arcas del estado no sólo por los impuestos, sino por las ganancias netas que puede dejar. Sería un flujo de divisas en dólares que al gobierno le ayudaría mucho.
Leer también: Vicentín intervenida: Luchemos por su expropiación y plena estatización
También se empezaría a regular el tema de los granos, en el mercado interno y externo. Las empresas que hay ahora son casi todas extranjeras, y ellas regulan el precio y la salida y entrada de granos, juegan con el valor del dólar.
Regular el mercado podría ser una buena iniciativa para que las grandes agroexportadoras no manejen solas el negocio de la exportación de granos o subproductos.
V: Ustedes se pronunciaron a favor de la expropiación de la empresa, ¿cómo ven el cuadro actual, en el que el gobernador de Santa Fe Omar Perotti se pronunció por buscar otras alternativas, el juez dio marcha atrás con la intervención y pareciera que el gobierno no va a avanzar con la expropiación?
CM: Nosotros nos pronunciamos, no solo como Federación, también como sindicato afiliado en Reconquista. Ayer sacamos un comunicado en conjunto con el sindicato de San Lorenzo que tiene parte de los trabajadores a favor de la expropiación de la empresa.
Acá lo que hay que entender es que la empresa que se va a expropiar no es una empresa en óptimas condiciones, ni en parada en una buena posición, se va a rescatar una empresa que está fundida. No sé cuánto va a quedar, con el juez que repuso a los directivos de Vicentín al frente del a empresa. Hay que tener mucho cuidado con el vaciamiento. Si siguen estos tipos al frente, los Nardelli, los Padoán, los Vicentín, corremos el riesgo de que se produzca un vaciamiento.
Perotti estuvo reunido con el presidente Alberto. Se sigue viendo el tema de la intervención, pero el gobierno está abierto a armar una empresa que sea parte estatal y parte de otra firma privada. Pero creemos que igual hay que seguir avanzando con la intervención. Más teniendo en cuenta que podrían producir un vaciamiento.
Después del DNU del gobierno sobre la expropiación de la empresa, automáticamente los directivos empezaron a hacer un vaciamiento y una fuga de divisas y capitales fenomenal. Se han hecho presentaciones judiciales para que el juez vaya para atrás con ese dictamen de reponer a los directivos. Si los repone es porque deben tener algunos intereses creados. Hay que ver con qué activos queda la empresa. No vaya a pasar que los activos que le quedan no alcancen para pagar las deudas, que es lo más probable que pueda pasar.
Esto es un camino largo, recién empieza.
Algunos economistas asesores nuestros dicen que si se abren los libros contables de la empresa (si es como dicen solo una firma, Vicentín SAIC) puede llegar hasta marzo la revisión de todo el entramado. Si se llega a intervenir la empresa entera, con todas sus controladas podría llevar hasta dos años para ver dónde y cómo hacen la fuga de divisas. Es un negocio muy difícil por las ramificaciones que hacen creando empresas paralelas, en el extranjero, o sociedades con otras empresas. No se sabe dónde empieza una y termina la otra.
Es una trama muy complicada, todos están muy apurados pero esto va a llevar tiempo. No hay certeza todavía, y ni siquiera Vicentín presentó los balances del 2019. Se necesitan para saber dónde está parada. Es un tema que va para largo.
V: ¿Cuál es la situación de los laburantes de la empresa? ¿Qué cantidad son y cómo enfrentan esta situación?
CM: La situación de los trabajadores es de incertidumbre. Los que están en Puerto San Lorenzo, donde está la mayoría, están con suspensiones, cobrando salarios viejos o sin cobrar. Es muy difícil la situación.
La parte que nuestra Federación representa, en Avellaneda, del último bono que firmamos en diciembre de 2019 cobraron solamente una parte. La actualización salarial que hicimos al 30 de abril, hasta este momento no se la han pagado, están con el sueldo viejo. En este momento la planta sigue trabajando al 50%. Los compañeros enfrentan la situación como pueden.
Desde los medios no se les da una voz a los trabajadores para que puedan expresarse. Ellos también están a favor de la expropiación. En el medio de toda esta incertidumbre, para ellos es una luz de esperanza que el gobierno se pueda hacer cargo y que mediante un DNU recalque que se van a priorizar las fuentes de trabajo y los salarios.
Los trabajadores en este momento están con esperanza. Lo único que quieren es trabajar. Están esperando para ver cómo se resuelve este problema.
V: ¿Cómo ven la perspectiva de la nacionalización del comercio exterior para el control estatal de las exportaciones como salida a la necesidad de recursos del país?
CM: Más allá de cómo quede la conformación de la empresa, si es expropiación o mixta, creo que, si se puede reactivar, las divisas que entren por las retenciones serán más “legales”. Con este entramado lo que declaran es muy poco. Si está el estado presente van a tener que declarar cuáles son las divisas y todo lo que venden. Por el lado de las retenciones, no habrá tanta evasión al fisco.
Y por otro lado, al ser parte de una empresa van a tener ganancias. La mayoría de las ventas son el dólares por la exportación, un flujo muy grande. Al gobierno le vendría muy bien por el tema de la deuda externa y con el FMI. Además, se podría clarificar mejor la compra y venta y la agroexportación. Con el estado como controlador entrarían más impuestos.
Como salida para la necesidad de recursos que tiene el país va a ser un buen aporte a las arcas del estado.