Un aspecto fundamental que se evidencia en el Proyecto de Ley de Presupuesto 2018 es el recorte a las áreas fundamentales para la prevención de las violencias machistas, el seguimiento y atención a mujeres, tras y travas en situación de riesgo.
El propio proyecto de Ley estipula una caja anual para el Consejo Nacional de las Mujeres de $161.548.292, lo que no sólo representa $2 millones menos en comparación a 2017 sino que tampoco tiene en cuenta la creciente inflación (que según el mismo proyecto de ley, estima que será del 15,7%) .
El Presupuesto 2018 contempla un 15,7% de inflación. Entonces para mantener los valores aprobados en 2017, para el Presupuesto 2018 el ahora Instituto Nacional de las Mujeres (INAM – ex Consejo Nacional de las Mujeres) debería recibir $191.295.000.
Este nuevo recorte que se pretende ejecutar en 2018 es un grave golpe hacia nosotras. El ajuste no sólo va por la disminución de subsidios para víctimas de violencia, sino también limita la construcción de refugios y el asesoramiento o la intervención de equipos interdisciplinarios para abordar cada caso y acompañar a cada mujer, trans o trava en situación de violencia, que puede valer su propia vida.
¿Y qué dice el gobierno?
En el último informe que el Jefe de Gabinete Marcos Peña dio en el Congreso, aseguró que en 2017 el Presupuesto anual “prevé para el Consejo Nacional de la Mujer una asignación de $96,5 millones. Mientras que el presupuesto 2018 para el INAM prevé un incremento del 67,4% respecto a dicha asignación”. Pero lo que Marcos Peña no dice es que el presupuesto para el INAM de 2017 fue de $116,5 millones ya que a los $96,5 que el dice, se le sumaron otros 20 millones aprobados este año por el Congreso y también se le destinaron unos 47 millones extra para el Plan de Acción (que nunca se acciona).
En la misma línea, el programa de Educación Sexual Integral, que depende del Ministerio de Educación, recibirá apenas $21.852.645 y el de Escuelas Populares en formación de género solo $1.021.050 pesos. A su vez, en el Proyecto de Ley de presupuesto 2018 no está detallado aún cuánto se le designará al Programa de Asistencia y Patrocinio Jurídico Gratuito a Víctimas de Violencia de Género, del Ministerio Público de la Defensa.
Mientras tanto en dos años de gobierno, el macrismo , en connivencia con Fabiana Túñez, tan sólo se limitó a presentar una y otra vez un “plan de acción” que obliga a la creación de tan sólo 69 refugios: menos de dos hogares por provincias, con el objetivo de presentarlos en 2019. Un chiste violento y machista.
Por otra parte, en la Ciudad de Buenos Aires el gobierno de Cambiemos ejecutó un recorte extremo al presupuesto para la Dirección General de la Mujer y sobre todo al programa de Asistencia a Víctimas de Violencia de Género golpeando así no sólo al programa sino también a las trabajadoras del mismo.
Este gobierno ha dado terribles muestras, de ser el abanderado del machismo. A pesar de que las cifras de femicidios aumenta, el macrismo y sus cómplices, sin ningún pudor recorta cajas que representan derechos mínimos para nosotras o que garantizan un acompañamiento que nos permita ser sobrevivientes de la violencia héteropatriarcal.
Si nuestro derecho a vivir, para ellos no vale nada, entonces nosotras estaremos en las calles exigiendo nuestro derecho a una vida digna, al aborto legal seguro y gratuito, al cupo laboral trans y trava, al acompañamiento de equipos interdisciplinarios, a la construcción de refugios. Por la erradicación de las redes de trata y proxenetas que arreglan sus negocios con el comisario de turno y los políticos de cada municipio o provincia.
Basta de planes de acción que nunca se concretan. Las mujeres, las travas y trans vamos por nuestros derechos hoy.
