Foto de Agenciafe
Les docentes de la Ciudad de Buenos Aires venimos sufriendo los embates del Gobierno hace años, con un ajuste en educación cada vez más profundo. Este año, en el marco de la crisis provocada por la pandemia actual, ese ajuste se recrudeció mucho más, y nos golpeó al igual que al conjunto de la clase trabajadora.
La exigencia que venimos sufriendo en relación a la virtualidad, la falta de equipamiento para desarrollar nuestra tarea, la dificultad de conectividad, nuestra y de nuestros estudiantes, se vio acompañada de un pago del aguinaldo en cuotas, y ahora del incumplimiento del aumento en cuotas  el mismo gobierno había establecido en el mes de febrero.
Este año iniciamos con una paritaria  a la baja y en cuotas. Pero además de eso, a partir de la vigencia de la Ley de Emergencia de Larreta, el gobierno no solo pasa a incumplir con la reapertura de la negociación salarial pautada para junio sino que además decide eliminar la última cuota que se debía cobrarse en julio, un  7%.
Así, en el distrito más rico del país, la crisis la pagamos quienes tenemos salarios sumamente empobrecidos que no superan el ingreso de la canasta básica.
Por su parte, el escandaloso acuerdo entre CTERA y el gobierno nacional de 0% de aumento, no nos suma a la hora de conseguir mejores condiciones para la pelea en cada jurisdicción. Y  cabe aclarar que el anuncio de un bono de 1210$ durante cuatro meses, no implica un aumento salario porque eso  ya se venía cobrando.
Pero el congelamiento salarial no es el único ni el más grave de nuestros problemas. Hace algunas semanas el gobierno inició los actos públicos virtuales, algo que los sindicatos docentes consideraban necesario porque se habían suspendido al comienzo de la cuarentena dejando a muchísimes  docentes sin cargo. Sin embargo, su implementación está siendo totalmente arbitraria, carente de transparencia y sin posibilidad de impugnación, lo cuál ha generado muchísima resistencia y un sinfín de problemas. Pero no sólo eso, con la excusa de que ahora existe la posibilidad de tomar cargos, se ha dado de baja a la resolución que impedía los ceses durante el aislamiento, lo que ha dejado a cientos de docentes sin trabajo, y sin la posibilidad real de acceder a un nuevo cargo.
Por todo esto, es que esta semana no volvimos a las clases virtuales. La medida fue votada por Ademys en una asamblea que definió un paro de 72 hs, mientras que UTE convocó a un cese de actividades por 72 hs.
Desde Ademys, se promovió y motorizó que este sea un paro activo. En ese sentido se impulsó y  llevó adelante una serie de actividades que contaron con buena participación de la docencia. Algunas  de estas fueron la concentración en Jefatura de gobierno para entregar una nota con el  pliego de reclamos, y la radio abierta virtual que transmitió por redes. De esta última participaron compañeres que hablaron en representación de diferentes programas y niveles educativos en conflicto, y también familias de nuestres estudiantes que contaron las dificultades para sostener la virtualidad así como la terrible situación económica que están atravesando.
Por últimos, el miércoles se realizó una asamblea abierta para definir de manera conjunta cómo seguir. Allí se votó una serie de acciones para dar continuidad al plan de lucha, destacándose la pelea contra el cese suplentes decretado por el gobierno.
La tarea que nos queda por delante es seguir organizando al conjunto de la docencia y a la comunidad de las escuelas. Docentes, familias y estudiantes debemos dar esta pelea de conjunto exigiendo que la educación  sea realmente una prioridad: salarios dignos, construcción de escuelas, bolsones de alimentos abundantes y de calidad, conectividad y computadoras para docentes y estudiantes, y un protocolo para el regreso a clase que no se rija por las presiones empresariales, imponiendo tiempos que no atienden a la gravedad de la situación epidemiológica, sino que cuide a docentes, familias y estudiantes.
No al congelamiento salarial
No al cese a los suplentes
Ingreso de emergencia para docentes sin cargo
¡¡Basta de ajuste en educación!!
¡¡Impuesto a las grandes fortunas ya!!

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