Neuquén vuelve a ser noticia nacional, esta vez no por Vaca Muerta y la supuesta lluvia de dólares sino por la condena contra el secretario general del Sindicato de Trabajadores Municipales de Neuquén (SITRAMUNE) por un corte de calle en el marco del despido de 33 trabajadores/as del área de Desarrollo Social durante el año 2017.
Esto fallo sienta un precedente muy negativo para la organización de la clase trabajadora porque intenta limitar el derecho a huelga consagrado como derecho universal y una de las principales formas defensivas que tenemos frente a los atropellos de los gobiernos y las clases dominantes.
La noticia fue presentada por muchos medios oficialistas como una bocanada de aire fresco aludiendo al antiguo precepto de que el derecho de libre circulación (principalmente de mercancías) no puede ser mellado por un interés sectorial. En tono triunfal Infobae llevó a titular cosas como “Fallo histórico: Neuquén logró condenar a un sindicalista por cortar calle” dejando al descubierto la funcionalidad de los medios de comunicación frente a la resolución de los conflictos en favor de las clases dominantes.
Santiago Baudino, secretario general de SITRAMUNE, fue encontrado culpable del corte de calle realizado en agosto del 2017 por el despido injustificado de 37 trabajadoras de Desarrollo Social del municipio de Neuquén Capital al mando del Pechi Quiroga (Cambiemos). El responsable de tamaña injusticia es el juez de garantías Mauricio Zabala quien utiliza este recurso en un año electoral para adoctrinar a quienes nos movilizamos en la ciudad contra el gobierno municipal y provincial, pero también para sentar precedente y extenderse en todo el país.
La combinación de métodos para reprimir y perseguir a los y las luchadoras sociales es el único camino que tiene Cambiemos para asegurarle al FMI un ajuste fiscal que garantice la bicicleta financiera y la fuga de capitales en proporciones históricas. El 2019 es un año de alta conflictividad social, no tan solo por la disputa electoral sino por la crudeza del panorama social donde la cotidianidad se hace cada día más cruda.
No es casual que este antecedente se genere en la provincia de Vaca Muerta, el único sector de la economía del país que le permite a Macri conseguir inversiones en dólares provenientes del exterior. Ya se han producido condenas a las comunidades Mapuche que han «osado» levantarse frente al saqueo de nuestros bienes comunes por parte de los capitales trasnacionales. Este nuevo fallo viene a golpear a la clase trabajadora que resiste el ajuste, que resiste la miseria, que resiste el hambre.
¡No todo está dicho, tenemos que enfrentar en unidad este fallo patronal