La semana entrante, del 22 al 26 de octubre, tendrán lugar las últimas cuatro elecciones en la Universidad de Buenos Aires. En el año de la rebelión estudiantil a nivel nacional, la izquierda tiene que avanzar para garantizar que haya un movimiento estudiantil de pie para seguir enfrentando el ajuste.
A partir de este lunes 22 en las facultades de Arquitectura, Psicología, Sociales y Filosofía y Letras habrá elecciones para centro de estudiantes. El escenario en el que se desarrollarán esta signado por la crisis que el gobierno nacional hace meses viene atravesando y el ajuste que viene desplegando sobre el conjunto del pueblo trabajador. Sin ir más lejos, en esa misma semana tendrá lugar la discusión en la Cámara de Diputados del Presupuesto nacional con el que Cambiemos en acuerdo con los gobernadores quieren sellar el hambre y miseria para millones. Claro que deberá enfrentarse a la masiva movilización que se está convocando para este 24. Ese mismo presupuesto establece un aumento de cerca del 32% para la Educación Superior, respecto a la última asignación, quedando varios puntos debajo de las cifras de inflación. Los gastos de mantenimiento que muchísimas universidades, principalmente las del conurbano, tuvieron enormes dificultades para cubrir, sin lugar a dudas van a tender a agravarse de ser aprobada esta distribución, que sólo favorece sideralmente al presupuesto para seguridad.
Al mismo tiempo, aún están presentes en la memoria las enormes movilizaciones estudiantiles que entre julio y agosto atravesaron a más de una decena de Universidades nacionales. En este punto, la UBA constituyó uno de los epicentros del activismo. Las asambleas y tomas en las facultades de Filo, Sociales y Psico congregaron a centenares de estudiantes en defensa de la educación pública. Un claro saldo del nivel de respuesta dado por el movimiento estudiantil e impulsado por el conjunto de fuerzas de izquierda fue lograr derrotar a la Franja Morada, ni más ni menos que en Medicina. Ese es el camino a seguir, que debe ser consolidado en las elecciones que restan. De lograrse resultados favorables en este último tramo, las maniobras que Emiliano Yacobitti (Franja Morada) articuló desde el mismísimo rectorado para quedarse con la FUBA serían en vano, ya que volvería a manos de la izquierda.
Unidad para vencer
Tanto en Filo como en Sociales, acompañamos a lxs compañerxs de HLI que forman parte de la Izquierda al Frente y Oktubre, respectivamente, en las que el conjunto de las fuerzas de izquierda han confluido. La disputa en ambos casos es muy concreta.
En Filosofía y Letras lo que se pone en disputa es la independencia del centro de estudiantes de las autoridades de la facultad. La gestión actual, continuidad política de los últimos 15 años por lo menos, pese a su retórica combativa, se dedica a administrar la miseria sin intenciones de dar una disputa real contra el ajuste en las universidades que el macrismo ejecuta. Así se puso de manifiesto durante la toma de este año, a la que, tras el cierre del acuerdo por parte de los sindicatos docentes kirchneristas, buscó levantar a como dé lugar, aun cuando el movimiento estudiantil seguía en píe de lucha en todo el país. En el día a día de Filo, esta misma “miserocracia” se ve sin ningún titubeo en el enorme número de docentes ad honorem, que ni con este ni con el anterior gobierno lograron respuestas a su situación, así como también en las condiciones de cursada y en las insuficientes becas que garanticen el acceso y la permanencia de lxs estudiantes. Por todo esto, frente al armado entre La Mella y Nuevo Encuentro (El Colectivo) , la única opción en condiciones de seguir impulsando la lucha en defensa de la educación pública, fomentando las asambleas e impulsando espacios de base, es la Lista 4- La izquierda al Frente.
En sociales el escenario se plantea a tres bandas, siendo una disputa abierta entre la UES, La 15 (Mella , Nuevo Encuentro y Cámpora) y Oktubre (PO, PTS, HLI y el conjunto de la izquierda). La gestión de la facultad y el centro de estudiantes son lo mismo. El aberrante encubrimiento que tuvo el violento machista de Cristian Bay, ex Secretario de Desarrollo Universitario, Inclusión y Bienestar y dirigente de la UES, que incluyó ataques institucionales contra las mismas compañeras que él había violentado y que generó el repudió del conjunto del estudiantado, son la más clara muestra de esta conjunción entre la burocracia estudiantil y las autoridades. El PJ (UES) en la universidad, que en su momento contó con el aval del kirchnerismo para sacar a la izquierda de la conducción generó las maniobras más inverosímiles para levantar la toma y tirar hacia atrás la lucha del movimiento estudiantil. Sus antiguos aliados, La Cámpora, Nuevo Encuentro y ahora también la Mella, en la Lista 15, se pasean, mientras tanto, por los pasillos de la sede de Constitución abrazados con Felipe Solá, uno de los principales responsables políticos del asesinato de Darío y Maxi. Está claro que no son una opción para construir un centro CECSO a la altura de enfrentar al macrismo. Por eso, la conformación de la lista Oktubre, donde participan lxs compañerxs de HLI es la gran novedad de esta elección, donde el conjunto de la izquierda va con todo para recuperar una de las herramientas gremiales más importantes del movimiento estudiantil de la UBA. Es sólo de ese espacio unificado que puede surgir una alternativa para que el enorme proceso de movilización y participación que emergió desde las bases este año siga creciendo.
¡En estas elecciones, vamos con la izquierda!
¡Fuera Macri y el FMI!