Otro ingenio dejó de moler. Como ocurriera con el San Juan, ahora se suma Santa Bárbara, quien dejó de moler a principios de esta semana. Algunas de las razones de esta nueva crisis que afecta a la principal actividad productiva de la provincia.
El ingenio Santa Bárbara, explotado por Energía Sustentable S.A., propiedad de Julio Colombres, dejó de moler el lunes. De esta forma, casi 400 trabajadores quedaron suspendidos por tiempo indeterminado, aun cuando el resto de los 13 ingenios sigue moliendo.
Al igual que en el caso del San Juan, la firma tomó esta decisión imprevistamente, por lo que los obreros se declararon en estado de alerta y movilización de inmediato.
Si bien la firma argumenta la escasez de materia prima, lo cierto es que las deudas con los trabajadores vienen a sumarse a una larga serie de desfinanciamientos que, en el caso de los asalariados, viene desde marzo.
Este caso se suma al del ingenio San Juan, con el agravante de que ambas fábricas, se estima, no realizarían tareas de mantenimiento en el verano ante la incertidumbre de comenzar la zafra 2019, generando un nuevo desfinanciamiento.
Hasta el momento, la FOTIA sigue muda. En un contexto de agudización de la precaria situación de sus afiliados, el sindicato solo ha optado por el diálogo y la dilatación de la incertidumbre para más de 700 obreros del sector. A ello habría que agregarle los accidentes por falta de mantenimiento que, en el último mes, se produjeron en el ingenio La Corona, donde tres obreros sufrieron quemaduras de primer grado y un cuarto resultó intoxicado. La única respuesta que dio Palina, el Secretario General del gremio fue a “esperar que el precio del azúcar no siga bajando, porque puede resultar más complicado el panorama azucarero”. Mientras tanto, los obreros, siguen esperando en la calle.