300 mil trabajadores y trabajadoras coparon la plaza frente al Congreso de la Nación para rechazar las reformas laboral, previsional y fiscal. Las concentraciones masivas se replicaron en distintos puntos del país, destacándose las de Mendoza, Bahía Blanca y Tierra del Fuego, entre otras. Por la noche, en una sesión expres, los senadores dieron media sanción a la reforma que condena a los jubilados.

La jornada del miércoles 29 fue un éxito porque demostró en las calles el rechazo popular a las reformas y la disposición de lucha de un sector significativo del movimiento obrero y el campo popular para defender sus derechos y no resignarse a entregar sus conquistas históricas. Así, quedaron expuestos tanto el triunvirato de la CGT que viene negociando la reforma laboral como los sectores del PJ que más tarde aprobaron en la cámara de senadores la reforma previsional macrista.

El acto central frente al Congreso de la Nación tuvo como oradores a los titulares de ambas CTA, Hugo Yasky y Pablo Micheli, el secretario gremial de la CGT Pablo Moyano y el líder de la Corriente Federal Sergio Palazzo. Las avenidas Callao y Entre Ríos desbordaban de gente cuando comenzó el acto. Por Avenida de Mayo ingresó el sindicalismo combativo y la izquierda con una importante columna. También se destacaron las columnas de los movimientos sociales, de desocupados y precarizados. Todos confluyeron frente al Congreso poniendo de relevancia, una vez más, que para enfrentar semejante ofensiva es imprescindible la unidad de acción de todos los sectores dispuestos a luchar en las calles.
En otras ciudades también se realizaron movilizaciones masivas. En Mendoza, unas quince mil personas se movilizaron desde el Km0 a la legislatura provincial convocados por las regionales locales de la CGT y de ambas CTA. Allí, se destacaron las intervenciones del sindicato judiciales de Mendoza, que frenó la intervención estatal meses atrás, y la del SUTE recuperado con su ya clásica consigna “Ahora es cuando!” que contó con una columna de casi siete mil trabajadores y trabajadoras de la educación, en el marco del paro nacional de CTERA. La jornada se cerró en las puertas de la comisaría tercera en donde distintos sectores confluyeron hasta que liberaron a una compañera feriante detenida horas más temprano.

En Tierra del Fuego, hubo importantes movilizaciones tanto en Ushuaia como Río Grande. En ambos casos, al rechazo de las reformas se sumó como consigna central el repudio a la exoneración del dirigente docente Horacio Catena. En Bahía Blanca la CTA Bahía- Dorrego junto a la Corriente Federal y numerosos gremios de la CGT convocarona a una masiva movilización unitaria que concluyó con la lectura de un documento al que adhirieron más de cincuenta organizaciones.

La nula visibilidad mediática de la jornada de lucha contra las reformas es la muestra del impacto que la misma tiene y la preocupación que le genera al gobierno. La revolución no se televisará y la lucha contra el neoliberalismo tampoco. Pero queda la certeza de que sólo por este camino, con convocatorias masivas y unitarias, es posible hacer retroceder al macrismo y sus aliados – como el triunvirato de la CGT y el PJ- en el intento de avanzar sobre nuestros derechos para incrementar sus ganancias. A su vez, es necesario profundizar la presión por abajo desde cada sector para que los convocantes no pretendan una salida negociada de manera particular y una mera oposición formal y pacífica. Es por eso necesario dar continuidad a un plan de lucha con un paro que pueda ponernos en las calles con más fuerza y exprese el rechazo popular a las reformas, tal como propuso en Mendoza nuestro compañero Sebastián Henríquez.

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor, ingresá tu comentario
Por favor, ingresá tu nombre aquí