Con la participación de unas 300 personas de modo virtual, la Autoconvocatoria por la Suspensión e Investigación de la Deuda, al cumplirse 20 años del fallo judicial en la causa Olmos, realizó una actividad homenaje al principal impulsor de esta investigación, con la participación de su hijo el historiador y activista de la temática, Alejandro Olmos Gaona. En ese marco, también se realizó un re-lanzamiento del “Juicio popular a la deuda y al FMI” con la presentación de la estructura del juicio, el cronograma y les destacades integrantes del tribunal.
Una deuda que tiene historia
El 13 de Julio se cumplieron 20 años del histórico fallo del juez Ballesteros en la causa que lleva el nombre de su impulsor “Olmos Alejandro s/ Denuncia”. En la sentencia se corroboró la existencia de 477 ilícitos en el proceso de endeudamiento producido durante la dictadura cívico-eclesial-militar (1976-1983). Esa causa, que duró 18 años, fue llevada adelante por Alejandro Olmos Gaona, mediante un esforzado y militante trabajo de recopilación e investigación por el que reunió millares de fojas con documentación, recortes periodísticos, declaraciones de funcionarios, informes periciales.
Toda esa información que se fue recopilando, desde 1982, representó un corpus probatorio muy importante que testimonia el engranaje de negociados y estafa que implica la deuda pública, beneficiando a empresarios, funcionarios y bancos. José Alfredo Martínez de Hoz, y su mano derecha Guillermo Walter Klein, serían señalados como los principales responsables políticos. Los beneficiarios directos la burguesía nacional y trans-nacional. En la causa aparecen señalados los dueños de todo, ese conjunto de familias que manejan hace siglos los hilos del poder en nuestro país. Ahí están los Macri, Fortabat, Bunge & Born, Bridas, Bulgheroni, Pérez Companc, Techint (Rocca), Soldati, Pescarmona, etc. La encumbrada burguesía argentina que adquirió miles de millones de dólares del Banco Central obtenidos mediante el endeudamiento de las empresas públicas en el exterior. Esta deuda privada fue posteriormente estatizada. ¡Un negoción!
Por el transcurso del tiempo en los que sucedieron estos ilícitos quedaron prescriptos. Nadie fue juzgado. En ese momento Ballesteros decidió girar la sentencia al Congreso, que, según la constitución, es el ámbito responsable de “arreglar el pago de la deuda interior y exterior de la Nación”. Pasaron otros 14 años para que se cree la Comisión Bicameral Permanente de Seguimiento de la Deuda Exterior, que al día de hoy y con letargo, tiene la tarea de investigar la política de endeudamiento y la fuga de capitales restringido al período macrista.
Por otro lado, al poco tiempo del fallo Ballesteros, gran parte de la deuda entraría en default a fines del año 2001. La renegociación del año 2005 no retomó las conclusiones de la causa Olmos, ni incluyó tampoco ningún tipo de investigación. En esta nueva renegociación, algo más de U$D 20.000 millones provienen de bonos emitidos en canje por aquella deuda que se dejó de pagar en el 2001. La realidad es que ningún gobierno en el período democrático hizo absolutamente nada con esta investigación. Lejos de esto, y con material probatorio fundado, respetaron y honraron las deudas de la dictadura genocida. Y nos siguieron endeudando.
¡Por un juicio popular a la deuda y a FMI!
Como continuidad de la importante tarea de investigación del endeudamiento realizada por Olmos, desde la Autoconvocatoria por la Suspensión e Investigación de la Deuda, se propuso iniciar un juicio popular e independiente al mecanismo de dominación que implica la deuda y el FMI.
Tal como explicaron les exponentes de la Autoconvocatoria: Demián García Orfanó (Poder Popular), Beverly Keene (Diálogo 2000-Jubileo Sur) y Beatriz Rajland (Corriente Política de Izquierda), la estructura del juicio se compone por un tribunal con 5 integrantes, 4 fiscales, 2 defensores, 3 peritos, un jurado de 9 integrantes y distintos denunciantes o testigo/as, que se irán expresando en foros semanales que abordan distintas temáticas: salud, ambiente, mujeres y disidencias, trabajo, educación, entre otras.
El cronograma tentativo prevé el inicio de estos foros temáticos el 27 de julio, con un funcionamiento semanal hasta el 30 de septiembre. Allí, las distintas organizaciones de base que conforman la Autoconvocatoria podrán expresarse y testimoniar sobre el impacto y las consecuencias de la deuda pública en su sector y en su vida. En octubre se instalará el juicio y el veredicto final.
La charla virtual culminó con algunas breves palabras de les integrantes de un tribunal compuesto por destacados referentes del ámbito de los DDHH, el derecho, el feminismo y la economía. Dejaron su saludo: Adolfo Pérez Esquivel, Miguel Julio Rodríguez Villafañe, Nina Burgo, Alejandro Bercovich, y Norita Cortiñas.
En estos días, en los que el gobierno nacional, en el medio de una Pandemia mundial con un fuerte impacto en las condiciones de vida y trabajo del pueblo, se encuentra en plena negociación de la deuda con los bonistas privados bajo legislación extranjera como antesala de las negociaciones con los acreedores privados bajo ley nacional y el Fondo Monetario Internacional que vendrán después; el cuestionamiento y enjuiciamiento a la deuda pública, probadamente ilegal, ilegítima, fraudulenta y odiosa, sigue siendo una tarea más que vigente.
Suspensión inmediata de todo pago e investigación de la deuda. No al pago de la deuda ilegal, ilegítima, fraudulenta y odiosa.
¡La deuda es con los pueblos, no con el FMI!
¡Es la deuda o la vida!