Una médica que le realizó un aborto a una menor abusada en el Hospital de Clínicas Nicolás Avellaneda de Tucumán es víctima de presiones por parte de médicos del hospital y de la comunidad anti derechos de la provincia.
Esta semana una niña de 11 años y su madre concurrieron al Hospital Nicolás Avellaneda a solicitar la práctica de una interrupción legal de embarazo (ILE). El equipo médico que la atendió procedió a realizar la ILE con la celeridad que requieren estos casos.
Sin embargo, la médica que garantizó la práctica comenzó a ser hostigada y perseguida en su lugar de trabajo por parte de sus pares y superiores, mediante mensajes y viralizaciones de whats app tanto de sus datos como de los de la niña, y también en redes sociales para que “sea escrachada” por haber actuado conforme a la ley.
La Fiscalía VIII a cargo de la Fiscal Adriana Giannoni tomó conocimiento del caso por el abuso sexual que sufrió la niña. Sin embargo, según versiones que trascendieron se requirieron informes al Hospital para indagar sobre la celeridad con la que se habría llevado adelante la práctica de ILE, por lo que la médica buscó asesoramiento legal.
Cabe recordar que en el mismo hospital se criminalizó a la joven conocida a nivel nacional como “Belén”, y que fue condenada a 8 años por sufrir un aborto involuntario.
Tampoco es la primera vez que el poder judicial de Tucumán se investigan interrupciones legales de embarazos y se intenta criminalizar por ello a los equipos médicos que intervienen.
El contexto
Esta misma semana se conoció que 200 niñas misioneras fueron obligadas a llevar adelante embarazos producto de abusos sexuales, y que inclusive una de ellas se suicidó arrojándose de una ventana del hospital donde se encontraba internada cursando 6 meses de embarazo. Sin embargo en la homilía del Tedeum por el 9 de julio, el Arzobispo de Tucumán Carlos Sánchez sentenció que “aborto es muerte”, felicitó a los médicos que se oponen a la realización de interrupciones legales de embarazos, y exhortó a que los senadores voten en contra del proyecto cuando se trate en el Congreso el próximo 8 de agosto. Igual sentido tomó el vicegobernador Osvaldo Jaldo, tras salir del Tedeum, quien declaró que estaba “a favor de las dos vidas” y designó a Tucumán como “provincia provida”, pese a ser una de las provincias con mayor tasa de mortalidad infantil.
Además de todo ello, este viernes 13 se realizará un abrazo simbólico al Hospital por parte de grupos antiderechos que se declaran a “favor de las dos vidas”.
La respuesta
Desde las más de 60 organizaciones que componen Ni Una Menos Tucumán, se expresaron apoyando a la médica y al equipo de salud mediante un comunicado donde cuestionaron al SIPROSA, al Poder Judicial y al gobierno de Tucumán por permitir que estas situaciones continúen repitiéndose. Por ello se convocó a un pañuelazo en el Hospital Nicolás Avellaneda el día jueves 12 a las 11 horas.