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El jueves 23 de julio, una patota del SUTECBA atacó con palos y golpes a trabajadores y trabajadoras organizados en la Junta Interna de ATE Promoción Social en instalaciones del Ministerio de Desarrollo de la ciudad, quienes venían desarrollando un reclamo por la mejora de las condiciones laborales, salariales y de las políticas públicas. Entrevistamos a Nadia “Toti” Polanco, Delegada General de la Junta Interna de ATE Promoción para que nos cuente cómo fueron los hechos.

Venceremos-Partido de Trabajadorxs: ¿En qué consistían las acciones que estaban desarrollando en el ministerio y cuáles eran los reclamos?

Nadia “Toti” Polanco: El jueves 23, trabajadores y trabajadoras del Ministerio de Desarrollo Humano y Hábitat, particularmente del área de Promoción Social, quienes trabajamos acompañando a poblaciones en diversas situaciones de vulneración de derechos, problemáticas de mucha sensibilidad y complejidad, como situaciones de violencia de género, situación de calle, de consumo problemático de sustancias, entre otras, nos encontramos haciendo una acción de visibilidad, en las instalaciones centrales del ministerio ubicadas en el barrio de Lugano. El objetivo de esta acción era exigirle a las autoridades que den respuestas acordes a todas las reivindicaciones que venimos llevando adelante, y en función de la precariedad laboral y salarial, así como de la necesidad de fortalecer de manera urgente las políticas públicas vinculadas al acompañamiento de las poblaciones más vulnerables de la Ciudad.

Se hace intolerable la falta de respuesta de los funcionarios y funcionarias del Ministerio a partir de que se profundiza un cuadro de precariedad de las políticas sociales y de la precarización laboral, que viene siendo sostenida en el tiempo, pero que se agudiza cada vez más, a partir del desarrollo de la pandemia y de las consecuencias que acarrea esta situación, así como la crisis económica, social y sanitaria que se desprende de ella. Estamos pidiendo cuestiones sumamente básicas que son la de poder generar una recomposición salarial y una mejora contractual para un número importante de compañeros y compañeras que se encuentran desarrollando sus labores en primera línea, bajo modalidades fraudulentas de contratación. Particularmente la tercerización a través de universidades, quienes cobran sueldos muy bajos, de $ 24.000, a los que se les descuenta el monotributo, y sin poder acceder a derechos básicos como por ejemplo una ART, ante este contexto sanitario como el que estamos atravesando. Por otro lado, hay un faltante de personal histórico que hoy se está profundizando de manera dramática, porque a partir de no tener los recursos acordes hemos visto expuesta nuestra salud y también las de las poblaciones con las que trabajamos, siendo que se han tergiversado criterios establecidos en los distintos protocolos. Criterios sanitarios ya ratificados y avalados en función de generar los mayores cuidados. Pero esto no se realiza de la manera acorde debido a que desde que ha empezado la pandemia, y las medidas de Aislamiento Preventivo Social y Obligatorio, lejos de poder fortalecer las políticas públicas vinculadas a la atención de la vulneración social de la ciudad, lo que vemos es un recrudecimiento de los faltantes que ya veníamos acarreando desde hace tiempo. En este momento, hay turnos que son cubiertos en algunos efectores como en los refugios donde se alojan víctimas de violencia de géneros, trata con fines de explotación, con una sola compañera para toda esa jornada. Es vergonzoso que habiéndose aprobado una ley de emergencia en la Ciudad de Buenos Aires, supuestamente orientada a fortalecer los Ministerios declarados esenciales, no haya llegado una inyección presupuestaria para poner en condiciones a las distintas políticas públicas que atendemos a las problemáticas más sensibles. Al día de hoy continúan sin formalizarse protocolos en algunas áreas, no se cuenta con todos los equipos de protección personal para las tareas territoriales. Asimismo, no hemos recibido ningún plus por las tareas críticas que desarrollamos, ni tampoco se promueven licencias para prevención de stress.

V-PT: ¿Cómo se dio la intervención de la patota del SUTECBA y qué respuesta hubo del ministerio y del gobierno porteño?

NTP: finalizamos la jornada donde visibilizamos una vez más nuestro malestar frente a la situación de precariedad, buscando obtener respuestas favorables. La jornada fue llevada adelante con equipos de protección personal para cada compañere, y con todas las medidas de cuidado, acorde a nuestro hacer enmarcado en una perspectiva ético política que pelea por todos los derechos. Al retirarnos del Ministerio, se hace presente una patota cuyos miembros se autoidentificaron como integrantes del gremio SUTECBA. Este grupo nos atacó diciendo “somos la mafia”, “somos los que mandamos acá”. Agresivamente nos plantearon que no podíamos estar en el lugar. Vinieron armados con palos con los cuales nos violentaron, también nos pegaron trompadas y patadas. Para defendernos generamos una acción de repliegue dentro del Ministerio. La patota sin embargo ingresó a las instalaciones del ministerio y continuó ejerciendo acciones de violencia. Esto lamentablemente no es la primera vez que ocurre, esto es un accionar sostenido, el cual repudiamos enérgicamente. Pero además, repudiamos el accionar de connivencia histórico que tiene esta patota con el gobierno de la Ciudad de Buenos Aires. Firmando paritarias a la baja, avalando el congelamiento salarial, no reconociendo el derecho de los compañeros y las compañeras que se encuentra con modalidades fraudulentas de contratación: la tercerización y las locaciones de servicio.

Este accionar, lejos de amedrentarnos, nos hace seguir firmes dando la batalla no solo para seguir repudiando y para luchar por eliminar cualquier forma de ejercicio de violencia, o cualquier avanzada que nos impida el desarrollo de nuestra libertad sindical, así como también, vamos a seguir dando una pelea fuerte por todos los derechos para cada trabajador y trabajadora, como para la población que acompañamos, como parte de una misma clase, la que vive de su trabajo.

La Junta Interna de Promoción Social es una herramienta sindical que hace más de 15 años se organiza desde cada lugar de trabajo, impulsando la democracia de base, poniendo por delante tanto los derechos de las trabajadoras y los trabajadores, como de las poblaciones con las que trabajamos. Con esa convicción y ese compromiso, damos la pelea para que se garanticen todos los derechos.

V-PT: ¿Qué caracterización podés hacer de este gremio, SUTECBA?

NTP: El SUTECBA es un sindicato que históricamente tiene una cogestión con el Gobierno en función de mantener salarios a la baja, de perpetuar la precariedad laboral y de las políticas públicas en el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires. Es la fuerza de choque de los distintos gobiernos que actúa violentando a quienes luchamos por tener otro piso de condiciones laborales, salariales y que busca poder brindar acompañamientos acordes a las situaciones de vulnerabilidad con las que trabajamos en los distintos programas. No es solo en actos como los ocurridos el último jueves, sino también en amedrentamientos, presiones, y hostigamientos que se sufren en diferentes espacios de trabajo. Esto último se ejerce desde vías institucionales a partir de qué la labor sea funcional a los diferentes gobiernos porteños. Es por eso que se ha premiado a referentes de ese gremio con cargos políticos. El desarrollo de la violencia se desenvuelve con impunidad, siendo que a pesar de numerosas presentaciones administrativas y denuncias, nunca se tomaron acciones determinantes ya que esa connivencia es clave para mantener el disciplinamiento en virtud de sostener el ajuste sobre lxs trabajadorxs de la Ciudad y sobre las poblaciones con quiénes se trabaja desde las políticas públicas. No es un dato menor que uno de los puntos sentidos de nuestro reclamo se vincula a la recomposición salarial para quienes revisten modalidades irregulares e inestables de contrato, que se constituyen como los sectores más postergados a quienes el SUTECBA llegó a desconocer como trabajadorxs y por eso no les afiliaba. Es un sector al que se discrimina sistemáticamente y que es pieza fundamental para empobrecer a la planta del Ministerio, y para deslindarse de obligaciones respecto del acceso a derechos laborales básicos como aguinaldo, obra social o ART. Ello se vincula con los hostigamientos cotidianos que pesan mucho más cuando es dirigido hacia compas con esas modalidades de contratación siendo que la fragilidad e inestabilidad de la relación laboral, es un factor central en las medidas de sometimiento ejercidas por el SUTECBA en favor de patronales exploradoras.

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