“Los bosques desaparecen, los desiertos se extienden, miles de millones de toneladas de tierra fértil van a parar cada año al mar. Numerosas especies se extinguen. La presión poblacional y la pobreza conducen a esfuerzos desesperados para sobrevivir aun a costa de la naturaleza. No es posible culpar de esto a los países del Tercer Mundo, colonias ayer, naciones explotadas y saqueadas hoy, por un orden económico mundial injusto.”
Fidel Castro
Tradicionalmente las subas en el precio de los alimentos han estado relacionadas con la meteorología o con el aumento de una demanda extraordinaria como la de China. Pero el escenario actual es diferente. A medida que se construyen más destilerías de etanol, el precio del maíz se está incrementando hacia su «valor equivalente» de petróleo. El mercado del alimento y el de la energía, históricamente separados, se están entremezclando. El precio interno del Bioetanol se incrementó de $5 por litro en Octubre de 2012 a $21 en Abril de 2019. Las exportaciones argentinas tienen como destino principal a EE.UU, España, Bélgica, Canadá, Malta, Países Bajos y Perú. La exportación hasta marzo de 2019 fue de 60 mil toneladas.
En el 2007, con el ingreso de los especuladores financieros para competir en el mercado de productos agrícolas, el precio de los alimentos básicos aumentó y el precio del trigo se duplicó, recordemos que es cuando la soja alcanzó su precio más alto en 34 años. La crisis alimentaria se multiplica en el mundo y el precio del trigo se triplica, como sucedió en México también en el 2007. En esta nueva economía, si el valor económico del combustible extraído del maíz excede su valor económico como nutriente, se verá desplazado como materia prima hacia el mercado de la energía.; a medida que aumente el precio del petróleo, también lo hará el precio de los alimentos basados en maíz. En esencia compiten por tierra y recursos, directamente con otros productos agrícolas, especialmente los alimentarios.
En síntesis, el aumento repentino de la producción de agrocombustible constituye una amenaza a la provisión de alimentos en forma global, a la mitigación del hambre; es decir, su habilidad para lograr la soberanía alimentaria. Para los empresarios capitalistas, claro está, la lógica de acumulación de ganancias se impone frente a las necesidades alimentarias y la salud de la población, y por supuesto, frente al cuidado del ambiente.
Multiplicando zonas de sacrificio: del campo fumigado al barrio con anhídrido carbónico
El monocultivo trae consigo la expulsión de comunidades y familias que viven y se alimentan del territorio desde hace más de 50 años, le siguen la deforestación y con ello, el destrozo del hábitat de numerosas especies animales, sumado a que con los cultivos se dispersan toneladas de plaguicidas, funguicidas y herbicidas. En Argentina, desde 1996 se pasó de 17 millones de litros de agrotóxicos vendidos a 370 millones de litros en 2013.
En Córdoba está ubicada la fábrica productora de Bioetanol (a base de maíz transgénico) Porta Hnos ubicada en barrio San Antonio, en la zona sur de la provincia. Porta comenzó a fabricar en febrero de 2012, hace más de siete años que lxs vecinxs sostienen una incansable resistencia frente a esta fábrica que contamina en su barrio.
La planta consume 700.000 litros de agua de red por día y produce 300.000 litros diarios de bioetanol. En su producción, contamina tirando al aire 40.000 Kg de anhídrido carbónico y despide durante el proceso cascarillas con atrazina de maíz transgénico. La empresa continúa su producción sin un Estudio de Impacto Ambiental, sin proceso de audiencia pública y no cuenta con habilitación del Ministerio de Energía y Minería de la Nación.
Un relevamiento realizado en 2016, indica un alto incremento de casos de cáncer (el 50% de piel), además de otros problemas generalizados de piel como dermatitis, irritación, etc. En el informe, también se dieron a conocer problemas de salud relacionados con dificultades respiratorias (casi el 60% de la población), además de abortos espontáneos, afecciones digestivas y malformaciones en uno de cada tres nacidos. Cabe aclarar, que mientras la ciudad de Córdoba presenta una taza del 1,6% de malformaciones, en la zona analizada se observa un 28% de situaciones.
Informes de profesionales de la salud y estudios ambientales realizados por la Universidad Nacional de Córdoba, dan cuenta de que el aire en Barrio San Antonio contiene sustancias químicas como formaldehídos, tolueno, xileno, hexano entre otros.
La situación actual, luego de exigir a la Municipalidad y a la Provincia la erradicación de la planta, es la espera de una resolución frente al amparo colectivo ambiental que presentó un grupo de vecinxs ante los juzgados federales al Juez Hugo Vaca Narvaja. Lxs vecinxs chocan contra el poder del agronegocio y el cerco mediático: Argentina tiene una Liga de Provincias Bioenergéticas (participan Córdoba, Santa Fe, Jujuy, Tucumán, Bs. As., Entre Ríos, Salta y Sgo del Estero) sostenidas por Empresas exportadoras como CARBIO y CEPREB que empujan el negocio de los transgénicos a costa de fumigaciones y enfermedades.
En materia de ambiente, Córdoba tiene una gran experiencia de lucha, uno de los ejemplos que no podemos dejar de mencionar es la organización y resistencia en la localidad de Malvinas Argentina cuando gracias a la tenaz lucha popular se logró patear el tablero del agronegocio expulsando a la enorme corporación Monsanto.
Otro de los casos, es el de las Madres de Barrio Ituzaingó que hace más de 17 años que vienen caminando juntas. Ellas, las madres esperan que se juzgue a las autoridades del gobierno y a los empresarios responsables del crimen ambiental de tu territorio. Sin embargo, el poder legislativo provincial en complicidad con los dueños del negocio agropecuario, acaban de sancionar la Ley 28990 del Programa de Buenas Prácticas Agropecuarias, que con 50 votos aprobó que el Ministerio de Agricultura y Ganadería, sea la “Autoridad de Aplicación” para controlar a los fumigadores en toda la provincia de Córdoba.
Porta es ilegal y contamina: la lucha continúa!
Luego de realizar distintas acciones directas – como el acampe frente a Tribunales, el encadenamientos de vecinxs dentro del Municipio cordobés, marchas y bicicleteadas por el centro de la Ciudad, un Cordobazo Ambiental que a 50 años del aniversario del Cordobazo, contó con la participación de numerosas asambleas ambientales como la de Sierras Chicas, Punilla, Traslasierras entre otras- la organización de vecinxs decidió plantar bandera frente a la fábrica y continuar combatiendo en el Barrio.
El pasado mes, se realizó un gran festival de resistencia en la puerta de esta fábrica, con la participación de artistas, organizaciones sociales y políticas y, sobre todo, vecinxs que realizaron una gran manifestación. Con gran convocatoria, durante más de ocho horas se llevó a cabo una muestra artística, de música, intervenciones y producciones surgidas de la propias asambleas que actualmente agrupa a lxs vecinxs: Asamblea VUDAS (Vecinxs Unidxs en Defensa de un Ambiente Sano) y FUERA PORTA .
Más allá de la decisión que tome el Juez Federal Hugo Vaca Narvaja, la situación en Barrio San Antonio y en zonas aledañas es desesperante. Familias que dejan sus casas, niñxs con distintas enfermedades crónicas, olor nauseabundo a distintas horas del día, una fábrica que produce agrocombustible ilegalmente y un barrio que huele a negocio… ¿y la Vida? La vida puede esperar… ese es el mensaje del Estado y del Juez.
Desde las asambleas ambientalistas seguiremos dando la lucha en contra de las zonas de sacrificio, en contra del extractivismo, por una economía planificada que nos permita una producción sostenible ¡sin territorios ni personas que sacrificar en pos de los intereses de acumulación de capital!