En lo que va del 2019 las espaldas de lxs laburantes se sobrecargaron de tarifazos, despidos e inflación en ascenso. Para ponerle un freno a esta situación, debemos canalizar la indignación y la bronca en organización en cada lugar para luchar contra este proyecto hambreador y construir una alternativa de fondo para nuestro pueblo.

En el 2019 se continúa profundizando el empobrecimiento de los sectores populares como consecuencia de la política de ajuste y precarización de nuestras vidas que lleva adelante el gobierno de Cambiemos. La situación económica se agudiza, se pierden puestos de trabajo con cierres y despidos masivos que dejan a miles de familias en la calle, y cada vez cuesta más llegar a fin de mes. Se intenta imponer también por la vía de los hechos la reforma laboral tan reclamada por las grandes empresas para liquidar los convenios de trabajo. Esta situación es insostenible sin un aumento sustancial de las políticas represivas y de disciplinamiento social del gobierno, que a su vez se constituye en un eje central y de campaña para Cambiemos: la utilización de las pistolas taser, la iniciativa de la baja de la edad de imputabilidad y la reforma del Código Penal son solo algunas expresiones de esta avanzada.

Para las mujeres y disidencias este año se inició corroborando una cruda realidad: los femicidios y travesticidios se suceden cada 25 horas en nuestro país y el gobierno solo prevé en el presupuesto estatal 11 pesos para cada mujer víctima de violencia machista. A su vez, después de la gran marea verde que se expandió por todo el país el año pasado, se pretende ahora que retrocedamos en derechos ya conquistados, como se vio en los casos de niñas que habiendo atravesado una situación de violación se les negó su derecho a la interrupción legal del embarazo.

Ante esta situación, nuestro pueblo continúa profundizando su resistencia. Lejos del inmovilismo, durante el mes de enero y febrero se desarrollaron movilizaciones contra los tarifazos en distintos puntos del país, jornadas de lucha contra la violencia machista y por el aborto legal, seguro y gratuito comenzaron a instalar en la agenda política las demandas del movimiento feminista preparándose para un nuevo 8M, así como también las políticas represivas encuentran su resistencia en nuevas manifestaciones callejeras y en los distintos territorios.

Existe entonces un potencial de lucha y resistencia que debe lograr expresarse en una alternativa política que se plantee de forma contundente derrotar al macrismo, al tiempo que supere los límites de una oposición que no plantea salidas de fondo a los problemas de nuestro pueblo.

Organizarnos en cada lugar
La indignación de muchxs laburantes y jóvenes que empiezan a buscar alternativas, para enfrentar la situación económica y social, puede desarrollarse en la búsqueda de un proyecto político que los represente y defienda los intereses populares. Con ese objetivo estaremos desarrollando durante el mes de marzo reuniones abiertas y actividades de los comités locales de Poder Popular. Espacios de participación abiertos, en donde las iniciativas y las propuestas para encauzar la lucha contra el macrismo son las protagonistas.

Consideramos que, para construir una verdadera oposición al macrismo, hay que organizarnos en todos lados por nuestros derechos y contra el ajuste feroz que nos intentan imponer. En cada barrio, en cada lugar de trabajo o espacio de estudio podemos generar organización popular que tome la iniciativa frente a las problemáticas locales, mientras es parte de una lucha más general contra el gobierno de Macri y el plan del FMI.

Experiencias como los comités locales de CABA, Quilmes, Lomas-Lanús, zona norte, Bahía Blanca, Mar del Plata, Córdoba, entre otros, dan cuenta de que en los sectores populares hay voluntad de involucrarse con la realidad de nuestro país, con los problemas del barrio y la ciudad, y que el único camino para hacer frente a los mismos y buscar soluciones de fondo, es con el protagonismo popular. Debemos ampliar, profundizar y multiplicar ese camino construyendo asambleas y reuniones abiertas para que Poder Popular se desarrolle de la mano de los reclamos populares más sentidos.

Así también somos conscientes que existen genuinas y valiosas experiencias organizativas desde lo social y lo gremial, cientxs de activistas que día a día realizan una labor social en comedores, espacios comunitarios, asambleas vecinales, en defensa de la educación pública, contra la violencia, machista, en asambleas ambientales, en espacios sindicales, en definitiva, dando una pelea constante para aportar desde esa especificidad a transformar la realidad. Los comités locales también son espacios que pretenden sumar a quienes participan de esas importantes experiencias, para que su aporte pueda alentar una alternativa política general, para que esos esfuerzos cotidianos puedan canalizarse en una opción política que pueda hacerle frente a este gobierno de ricos.

Hacia un gran plenario nacional
En ese camino, el próximo 6 de abril estaremos desarrollando un Plenario Nacional de Poder Popular que nos permita vincular e intercambiar sobre el trabajo desarrollado en los distintos comités de distintos puntos de las provincias de Buenos Aires, Córdoba y Mendoza, entre otras, abierto a quienes deseen acercarse a ser parte de los debates y aportar sus ideas y propuestas. En el mismo podremos trazar los lineamientos generales de intervención para el año, como así también los puntos programáticos centrales que debemos poner en agenda, desde una perspectiva nacional y federal.

Las perspectivas económicas para nuestro país no anuncian desenlaces alentadores. El nivel de deuda altísimo que tenemos, la pérdida de puestos de trabajo, la lluvia de inversiones que nunca llegaron, reflejan un cuadro en donde si no oponemos una firme resistencia popular, la crisis la vamos a terminar pagándola lxs laburantes y lxs que menos tenemos. Fortalecer una fuerza política que plantee claramente la necesidad de una ruptura total con el FMI como condición indispensable para gestar un proyecto a favor de los intereses populares en este marco, se vuelve indispensable.

En un escenario próximo electoral, las tareas de los comités locales estarán vinculados también a desarrollar una fuerte campaña por construir un polo unitario de izquierda, que entendemos podría encarnar el Frente de Izquierda y de los Trabajadores, superando sus propias limitaciones y realizando una apertura de dicho espacio que potencie una intervención conjunta de toda la izquierda ante la polarización entre dos variantes patronales que se intenta construir desde arriba. Apuntamos junto a la campaña política general a construir iniciativas y actividades político-reivindicativas en los barrios y en todos los frentes de lucha para construir comités amplios que promuevan la lucha contra los tarifazos, los despidos, y profundicen el protagonismo popular para acumular fuerzas a un proyecto de transformación social. En particular en CABA, además, estamos encarando la campaña para obtener 4 mil afiliaciones y alcanzar nuestra personería electoral en el distrito (ver recuadro). Este objetivo será un paso y un salto cualitativo para construir una propuesta política de alcance nacional.

En un contexto de ataques a las conquistas de lxs trabajadorxs que cuenta con la complicidad del PJ y la burocracia sindical, es una necesidad también la defensa de la representación parlamentaria de la izquierda anticapitalista y su ampliación a más representantes en el Congreso, Legislaturas y Concejos municipales que lleven una clara perspectiva en defensa de lxs laburantes, que tomen las demandas del movimiento popular a partir de sus organizaciones e impulsen en esos espacios legislativos donde siempre se le da la espalda al pueblo, como hemos visto recientemente en las votaciones de la reforma previsional, la ley de interrupción voluntaria del embarazo y la ley de presupuesto, por solo dar algunos ejemplos, una clara denuncia de las medidas antipopulares y pueda desarrollar un programa alternativo frente a la crisis en curso. En un próximo período, el macrismo aspira a aprobar una nueva reforma previsional aún peor que la anterior y avanzar con la reforma laboral. El rechazo y la lucha contra el plan de reestructuración capitalista que quiere llevar adelante Cambiemos será uno de nuestros ejes principales.

Desde ese lugar, impulsamos el desarrollo y consolidación de una fuerza que con su despliegue e intervención incorpore las demandas más sentidas del movimiento de mujeres y disidencias, que se ha convertido en un actor central de la lucha política en Argentina y el mundo. En este sentido, sostener bien alto la bandera del aborto legal, seguro y gratuito es fundamental, frente a las negociaciones y resignaciones de otras fuerzas que, en acuerdo con las distintas iglesias, pretenden negar este derecho tan básico y convalidar así las muertes en clandestinidad.

La situación política demanda que desarrollemos todos nuestros esfuerzos en mayor organización popular para derrotar al macrismo, por nuestros derechos, y levantar una verdadera alternativa por nuevas conquistas para una vida realmente digna.

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