Se cumplen tres años de la muerte de Lohana, y hoy la recordamos presente en casa batalla por la visibilidad travesti, parada con orgullo y fortaleza en cada frente de lucha.
Nos parece fundamental traerla a la memoria hoy, en tiempos donde se vuelve a cuestionar la participación de las compañeras trans y travestis en el feminismo.
Los diversos campos de batalla que se deben dar contra el patriarcado son muchos, implican una diversidad de aristas, y no a todes nos atraviesan por igual. Pero podemos recordar que Lohana, como muchas otras travas, estuvieron presentes ahí, repartiendo pañuelos verdes en algún Encuentro Nacional de Mujeres, peleando por la legalización del aborto, como también impulsando la ley de identidad de géneros, marcando un hito histórico a nivel mundial, en materia de avanzada en diversidad sexual.
Ser travesti es una identidad política latinoamericana que Lohana peleó y defendió a ultranza, enmarcada en base a romper con el binarismo y las concepciones europeas y norteamericanas, como también decidida a romper con el estigma, la criminalización y la desvalorización social sobre sus identidades.
Sobre todo, también la vida de Lohana implicó visibilizar las condiciones materiales de existencia de muchas travestis, su dificultad en el acceso a la educación formal y exclusión del mercado de trabajo. Luchó contra los códigos contravencionales que criminalizaban a mujeres, trans y travas en situación de prostitución, y denunciando desde una ferviente posición abolicionista como el patriarcado genera que un 95% de las travestis recurran a la prostitución como única forma de supervivencia.
Lohana Berkins es un símbolo de lucha y rebeldía, de pelea constante con un Estado que impide sistemáticamente por acción u omisión el acceso a derechos básicos como educación, salud y trabajo de quienes asumen su identidad como travestis.
Hoy la recordamos con impulso a seguir peleando contra el sistema patriarcal y capitalista, para romper con los silencios y con coraje estar orgulloses de ser mariposas, hasta la victoria siempre!