Los compañeros de la metalúrgica Rapi-Estant hicieron este martes 12 de junio su primera jornada solidaria para exteriorizar su demanda de pagos de salarios y defensa de sus puestos de trabajo.
En una tarde lluviosa frente a la fábrica ubicada sobre Ruta 3, a metros de la avenida Cristianía (Isidro Casanova, La Matanza), tortas fritas, pastelitos y tortillas sirvieron de menú para una alcancía solidaria que busca fortalecer los flacos ingresos de los 170 laburantes de la empresa y de sus familias. La firma desde hace un mes y semana no paga los sueldos, no se presenta en las audiencias y violó todos los acuerdos de pago mínimo a los que sus trabajadores accedieron. Atrasos en la paga de la quincena y aguinaldos colocaron a los obreros en una situación desesperante. Las semanas pasadas decididos a buscar respuestas salieron a golpear todas las puertas posibles: Gremio, Municipalidad, Acción Social, Ministerio de Trabajo, con lo que consiguieron que de parte del gremio, la UOM Matanza, done a sus afiliados la suma de $5.000 a cada uno.
Puntuales como pocos y sin ser corridos por la lluvia, los trabajadores prepararon un acto en donde hablaron sus delegados, contaron su situación e iniciaron un ejercicio que para la mayoría es nuevo: sobre la solidaridad planteada, construir los lazos que posibiliten la unión de los sectores afectados por políticas de ajuste, importaciones indiscriminadas y la sedición empresarial de avanzar sobre los derechos de los trabajadores y trabajadoras privatizando el trabajo, rebajando los salarios, despidiendo a los que tienen más antigüedad y un largo etcétera que impone una reforma laboral de hecho.
Si algo demostró la experiencia vivida a los compañeros, fue que la política sostenida por el gremio, que dice que es necesario aceptar rebajas salariales o despidos para defender la fuente de trabajo, es falsa. El gremio ha aceptado quitas de premios, adicionales por encima de convenio, sufrieron el despido de más de la mitad del personal y nada, su fuente de trabajo sigue peligrando. Porque lo que en realidad está haciendo la empresa, en el marco de un gobierno anti obrero, es impulsar de facto una reforma laboral, contando muchas veces con la colaboración del sindicato, lo que más temprano que tarde llevará a los sectores en lucha por la defensa de sus puestos, de sus salarios y sus derechos adquiridos, a plantearse en la necesidad de construir una dirección alternativa que enfrente coherentemente las políticas de ajuste y precarización laboral y avance hacia su reconocimiento como clase social independiente.
Para el próximo 20 de junio, en el mismo lugar, los compañeros están convocando un locro solidario. Esta vez con el primer miedo ya superado, seguramente se irán animando a más. Queda (desde este lugar a modo de propuesta o inquietud) para el próximo 25 de junio, día en que finalmente se hará el paro cegetista, la oportunidad para convertir un paro dominguero en una jornada de lucha en donde fortalezca las demandas de los trabajadores de Rapi-Estant junto a la unidad de otras empresas y sectores y las protestas en contra de los ajustes a nivel nacional y las políticas fondomonetaristas.

  • Contribución de “La Voz del Obrero”.  

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