acto de estatua alfonsin

El pasado martes 10 de abril tuvo lugar en Mendoza la reunión pública entre el gobernador Alfredo Cornejo (quien además se desempeña como presidente nacional de la UCR) y la senadora nacional de Unidad Ciudadana, Anabel Fernández Sagasti (referente de La Cámpora). La misma fue celebrada por quien fuera el candidato a gobernador por el armado kirchnerista en 2017, Juani Jofré, destacando la importancia de que Cornejo reconozca a la “oposición real”, la que puede “acompañar” al gobierno para construir “la Mendoza del futuro”. Así dejaron en claro que no sólo no resistirán las iniciativas de la UCR en la provincia, sino que además las apoyarán.

Días después de la reunión, por diversos medios, nos enteramos del acuerdo que transaron: el cornejismo llevará a la legislatura provincial la propuesta de juicios por jurados, que a Sagasti y su bloque le interesaba promover, a cambio de que los las diputadas y diputados K le den el visto bueno al proyecto de Cornejo para ampliar la Suprema Corte de Justicia. Se habla de un “sorpresivo acuerdo entre La Cámpora y la UCR”. Pero a nosotrxs no nos sorprende para nada, sabemos que los partidos patronales siempre estarán del mismo lado, aunque intenten engañarnos con fachadas progresistas.

Finalmente, el miércoles 18 de este mes, seis diputadas y diputados del PJ dieron su apoyo al proyecto del gobierno, permitiendo así que este llegue a Senadores la próxima semana. Lucas Ilardo, Jorge Tanús, Sonia Carmona, Omar Parisi, Alberto Rozas y Carlos Bianchinelli borraron con el codo lo que hace un tiempo escribieron con la mano. Es que hace sólo dos meses, estos mismos afirmaban que “ningún diputado peronista votaría la ampliación de la Corte para evitar un avasallamiento institucional del gobernador”.

Reformas a medida del ajuste y la represión

Las reformas que estos sectores preparan para la Justicia no traen ningún beneficio para las y los trabajadores. El juicio por jurados que promueve el kirchnerismo con la ayuda del gobierno, consiste en conformar un jurado de doce personas que definirán la culpabilidad o no en casos de homicidios. Entre los argumentos del proyecto se encuentran la necesidad de “humanizar” la justicia y “acercarla” a la ciudadanía. Para nosotrxs se trata de otro intento por darle una lavada de cara a una justicia que es clasista y sexista hasta los huesos. Dicha reforma no implica ningún avance en concreto para las necesidades de nuestro pueblo.

Por otro lado, la reforma de la Suprema Corte que busca ampliarla pasando de siete a nueve miembros, es impulsada por el gobierno de la provincia desde octubre del año pasado. Hasta el momento Cornejo no había conseguido el quórum necesario para que el proyecto avance y con esto sus intentos de tener mayor control sobre el poder judicial se vieron frustrados. Con esta reforma la Sala I tendría competencia en materia civil y comercial; la Sala II tendría competencia exclusivamente penal y la Sala III sería destinada a resolver en materia laboral. Lo nuevo es que agrega una Sala IV cuyo nombre es Superintendencia administrativa y bajo la cual estaría la conducción política y administrativa del Poder Judicial, sin debate con los ministros que integren las otras salas, cuyo trabajo se reducirá a lo jurisdiccional.

Desde el gobierno se plantea que esta división y el aumento de magistrados posibilitarían una mayor celeridad en los procesos judiciales. Lo cierto es que de esta manera el gobierno lograría tener control sobre salas estratégicas: en materia penal les interesa garantizar la mano dura y llenar las cárceles de pobres, mientras que en materia laboral podrán despachar rápidamente los cientos de juicios laborales que realizan a diario lxs trabajadorxs despedidxs y precarizadxs. Pero, de fondo, se trata de lograr el control de la Superintendencia administrativa para dominar todo el Poder Judicial.

Actualmente, Cornejo cuenta con el apoyo de cuatro de los siete miembros de la Suprema Corte. Entre ellos se encuentra el misógino José Valerio, quien a pesar de ser fuertemente repudiado por diversas organizaciones sociales, políticas y feministas fue nombrado miembro de la Suprema Corte, dando así Cornejo su primer golpe en el control político del Poder Judicial. Ahora, con la reforma judicial, sumará dos miembros más que defiendan sus intereses. Esta es la reforma que apoyaron los diputados K.

Pactan por su futuro

El telón de fondo del acuerdo celebrado entre la UCR y el kirchnerismo es una desesperada carrera por las elecciones de 2019. Cornejo viene jugando un perfil alto en los últimos meses. Mientras intenta despegarse del tarifazo del gobierno nacional -reclamando sólo una tímida “prórroga” para Mendoza y llamando a “consumir lo mínimo”-, se pasea por los principales canales de televisión. Cornejo apuesta a integrar la fórmula presidencial de Cambiemos en 2019 y eso no es ninguna novedad. Lo novedoso es su repentina “crítica” a algunas medidas económicas del macrismo, cuando hasta hace poco apoyaba por completo las decisiones del ejecutivo nacional.

Después de la reunión que tuvo con Macri para tratar el pago en cuotas de las facturas altísimas que pagaremos lxs mendocinxs en los próximos meses, Cornejo destacó la necesidad de marcar “con prudencia las disidencias”, diferenciando a la UCR del perfil PRO. Y jugó una carta más en la reunión del Comité de la UCR de la provincia de Bs. As, allí el jefe del radicalismo a nivel nacional afirmó: “No queremos ser meros acompañantes en Cambiemos” y se abrió camino en esta disputa al decir “trabajaremos para construir un nuevo líder natural de nuestro partido que pueda competir mano a mano en una presidencia de la Nación”. Es preciso recordar que el actual gobernador de Mendoza fue el diseñador de la alianza Cobos-Cristina en su momento, la que permitió una concertación de kirchnerismo con radicales k. Es decir, se trata de un armador político, con flexibilidad para las alianzas, que está apuntando los cañones a las presidenciales 2019.

Por su parte, Anabel Fernández Sagasti es la cara visible elegida por Cristina Fernández, la jefa política de Unidad Ciudadana, quien busca posicionar a la mendocina como figura opositora capaz de disputar la gobernación en las próximas elecciones. Desde el kirchnerismo hacen hincapié en la necesidad del diálogo entre gobierno y oposición para construir la “Mendoza del futuro”, dejando en claro que no están interesados en dar pelea ni organizar la resistencia frente al avance derechista de Cambia Mendoza, sino que tienen los ojos puestos en rearmarse como gobierno de cara a 2019. Prometieron resistir con aguante, pero sólo han dado muestras de entrega y conciliación.

¿Quién es la verdadera oposición?

En este hostil panorama político, las y los trabajadores no hemos estado inmóviles. El ajuste no nos pasa por un costado y eso se ha evidenciado en las calles, en los barrios y los lugares de estudio. Las y los trabajadores de la educación han sido la punta de lanza para los sectores combativos de la provincia, desde la lucha por paritarias en Febrero y la histórica movilización de 18 mil personas a casa de gobierno exigiendo Más para Educación, hasta las movilizaciones recientes donde el SUTE acompañó a las y los estudiantes organizadxs de los terciarios. En una misma sintonía de lucha se vienen replicando las concentraciones contra el tarifazo en distintos departamentos y barrios de la provincia, en donde las y los vecinos se autoconvocan y multiplican la protesta. Por su parte, a mediados de mes se realizó una contundente movilización de las organizaciones sociales contra el desmantelamiento de los programas de empleo. Ha quedado demostrado que la única oposición seria y consecuente que tiene hoy en día el gobierno de Cornejo es la del pueblo organizado, que sale a la calle.

Mientras lxs que transan se arrogan el mote de “oposición”, nosotrxs sabemos que la pelea diaria está en la organización de base, en nuestros lugares de trabajo y en las barriadas populares. La salida al tarifazo y el ajuste de Cambiemos y Cambia Mendoza la estamos construyendo lxs trabajadorxs en unidad. Profundicemos la lucha aquí y ahora para que no nos vendan más espejitos de colores y promesas de futuro. Este 1 de Mayo, en el día internacional de la clase trabajadora, tenemos una nueva oportunidad de demostrar nuestra fuerza y reencontrarnos en la lucha.

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor, ingresá tu comentario
Por favor, ingresá tu nombre aquí